Un caso del país

El presidente Leonel Fernández pensaba que con el anuncio de rescindir el contrato con la empresa Sun Land por el préstamo inconstitucional de US$130 millones, el caso sería cerrado. Es más el anuncio lo hizo el pasado viernes por la tarde para que se diluyera en el fin de semana. Ese fue el propósito.

Sin embargo, la mayoría de los dominicanos que, han asumido la denuncia de este caso como propio, exige hoy más que nunca respuestas ante tantas preguntas. Estas preguntas deberán ser respondidas por los funcionarios responsables de este escándalo en los tribunales dominicanos.

Como perredeísta, me siento orgulloso de mi partido. Si el PRD no hubiese hecho la denuncia, el país no se hubiese enterado de nada. Hicimos oposición útil. Y la seguiremos haciendo.

Hemos demostrado que actuamos con la verdad y con firmeza, sin tremendismos. Como ha dicho hoy en un artículo publicado en el Listín Diario por el destacado jurista dominicano, Olivo Rodríguez, «esa vigilancia responsable de un partido político sobre los actos del gobierno, ha evitado males mayores, al patrimonio público, pero sobre todo la débil institucionalidad del Estado, constituyéndose en un importante precedente frente a quienes hoy gobiernan y a los que en el mañana aspiran a conducir el Estado, refelejando además lo que debe ser una función capital de los partidos políticos en la sociedad moderna».

Hay que destacar el rol que han jugado importantes organizaciones como Foro Social Alternativo, la Fundación Institucionalidad y Justicia, la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios, Participación Ciudadana, y destacados líderes de opinión del país.

El país ahora aguarda la decisión de la Suprema Corte de Justicia, y también otras acciones legales que oportunamente se interpondrán ante este escándoloso caso en el que el presidente Leonel Fernández ha colocado sus intereses personales por encima del interés nacional.