Renuncia de Benedicto XVI: lección de desapego del poder

11 Feb

La noticia ha caminado desde muy temprano por todos los medios de comunicación del mundo: El Papa Benedicto XVI ha anunciado que renuncia de su puesto, por razones de salud, con efectividad el 28 de febrero. El texto íntegro de su comunicado, aquí.

Al margen de las diferencias que se puedan tener con Benedicto XVI, e independientemente de las creencias religiosas, en este apunte me quiero enfocar en una característica poco usual en los líderes políticos, y el Papa, en su condición de Jefe de Estado del Vaticano, es un líder político, es ejemplo de ello hoy. Ha demostrado que no está aferrado al poder. Que tiene la suficiente humildad para reconocer que no puede seguir al frente de sus delicadas funciones. Ha evidenciado que está desapegado del ejercicio del poder. En el caso del Papa, es la primera vez que ocurre en 600 años.

Cuántos ejemplos de políticos en diferentes latitudes que permanecen aferrados en posiciones de poder, cuando ha perdido sus capacidades y habilidades, e incluso, han perdido legitimidad. El Papa Benedicto XVI ha dado una profunda lección hoy, por lo que tiene mi admiración. Ojalá otros, enquistados en el poder, lo imiten. El mundo sería mejor.

 

Comentarios cerrados.