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Wikileaks, el documental

17 Dic

Es el documental producido por la televisión sueca. Son 57 minutos, sin desperdicios:

Wikileaks, su debut

15 Dic

El debut de Wikileaks a principios del 2010, antes de la divulgación de los cables sobre Afganistán, Iraq y la diplomacia norteamericana a nivel global, fue el poderoso video, titulado Collateral Murder. Julian Assange quizo titularlo «Permission to Engage», pero al final, decidió por un título que revela la triste realidad de su contenido: 12 civiles fueron muertos por las tropas americanas en Iraq. Son 17 minutos. Oir el diálogo entre los integrantes del helicóptero con la torre de control, y en el fondo, los disparos, y ver la muerte de inocentes es dramático. Antes de divulgar este video, Assange mandó a dos personas a Iraq para confirmar los hechos, lo que le tomó varios meses. Comprobado todo, lo divulgó. Las declaraciones del vocero del ejército americano son lamentables e injustificables. Es otra manera de comprobar la ira que ha desatado Assange en los centros de poder, sobre todo de la ultra derecha americana, que lo ha declarado enemigo de los Estados Unidos de América. En la otra cara de la moneda, es la transparencia a su máxima expresión.

Wikileaks y Nixon

13 Dic

Wikileaks ha roto con el secreto de Estado: Aquella información que los gobiernos preservan por años para luego revelar su contenido, incluso cuando sus protagonistas han desaparecido. Por ejemplo, en Estados Unidos de América, cada cierto tiempo son revelados los contenidos de 3,700 horas grabadas de las conversaciones telefónicas y personales del presidente Richard Nixon durante los últimos dos años antes de su renuncia en 1974. Las más recientes revelaciones están relacionadas con la opinión personal de Nixon sobre los judíos, los afroamericanos, los italianos y los irladenses. En el fondo, Wikipedia ha venido a ratificar lo mismo que está en esas grabaciones: La política exterior de Estados Unidos depende de la visión personal de quienes la formulan y la ejecutan. La única diferencia es que, si Wikileaks no hubiese existido, nos hubiésemos tenido que acostumbrar a las divulgaciones de las informaciones que solo el gobierno americano hubiese permitido luego de que las mismas fuesen dispuestas para el conocimiento público, como los Nixon Tapes. ¡Qué viva la Internet! ¡Qué viva la democracia!

¿Quién es Julian Assange?

9 Dic


Julian Assange siempre ha vivido «on the run», corriendo. Desde que nació hasta que se presentó a la Comisaría en Londres en donde guarda prisión preventiva hasta la vista de su audiencia el próximo 14 de diciembre. Es impresionante cómo su madre tuvo un impacto profundo sobre su personalidad. Fue ella que decidió que Assange no cursara estudios escolares, es decir, que no tuviera educación formal. Sin embargo, lo educó empíricamente con lo mejor de la literatura y de la filosofía. Fue ella que le impregnó esa resistencia a lo permanente, a lo rutinario, y al contrario, siempre vivir como un nómada, corriendo. Por que la propia historia de su madre fue así, al ser víctima de abuso por parte de su segundo esposo, quien pertenecía a una secta influyente, y que la persiguió. Assange vivió en la clandestinidad desde los once hasta los dieciseis años de edad.

A los 18 años contrajo matrimonio. Ahí se inició otra batalla en su vida, cuando luego de separarse, luchó para mantener la custodia de su hijo. Esa batalla la libró junto a su madre. Y es muy probable que durante ese proceso haya nacido la idea de Wikileaks, al ambos iniciar toda una campaña activa en contra del sistema de protección de niños, al extremo de grabar conversaciones en audio y video, obtener documentos secretos, en fin, exponer la burocracia de todo un sistema estatal. Al final, Assange llegó a un acuerdo con su esposa. Pero, como dice su madre, ya la adrenalina había hecho su efecto. El cabello de Assange que era marrón se convirtió en blanco, del stress que había estado sometido.

Luego de convertirse en pirata informático auto-didacta, fundó el grupo Internacional Subversiva, logrando incluso penetrar las oficinas del gobierno de Estados Unidos de América, y hacer ataques informáticos a empresas como Nortel en Canadá, en 1991. Sin embargo, había tres reglas que regían sus actuaciones: No destruir los sistemas informáticos objeto de actos de piratería, no alterar la información obtenida y compartir la información con todo el mundo. Las bases y principios de Wikileaks.

Como él dice, «somos amateurs». Es un abogado de las fuentes noticiosas, sin pasar por el filtro de la prensa. Aún, falta mucho por ver en esta historia fascinante de quien indudablemente es el personaje del año 2010. La historia completa de Assange, genialmente escrita en The New Yorker, aquí.

Nota sobre la foto: Portada de la revista Time.

ACTUALIZACION: Comparto con ustedes este video sobre la participación de Assange en TED. Sin desperdicios:

Wikileaks y Santo Domingo

29 Nov

Es la noticia que ha puesto al desnudo a la diplomacia americana. Y, como era de esperarse, entre los más de 250,000 documentos, hay cables que corresponden a la Embajada de Estados Unidos en Santo Domingo. Revisando la cantidad de documentos por país, me llama la atención cómo ha cambiado la geopolítica en los últimos años. Aquí detallo los países latinoamericanos por cantidad de cables llegados a Wikileaks, con una breve explicación personal:

1.- Bogotá 2,416 (Es el principal aliado de Estados Unidos en América Latina).

2.- Caracas 2,340 (El presidente de Venezuela es Hugo Chávez).

3.- México 2,285 (Es el vecino distante de Estados Unidos).

4.- Buenos Aires 2,233 (Es miembro del G-20).

5.- Tegucigalpa 1,958 (No nos equivoquemos, el Golpe de Estado de Zelaya, redobló las actividades de la Embajada).

6.- Brasilia 1,947 (Es el contrapeso de Estados Unidos en América Latina, G-20).

7.- Santo Domingo 1,675 (Comparte isla con Haiti; es aliado en El Caribe).

8.- Santiago 1,464 (Chile fue el primer país latinoamericano que suscribió un TLC con Estados Unidos).

9.- Quito 1,450 (La reserva de petróleo de Ecuador es de seguridad nacional).

10.- Lima 1,388 (Ha luchado contra el terrorismo, es aliado en la Comunidad Andina).

11.- La Paz 1,299 (El presidente de Bolivia es Evo Morales).

La geopolítica ha cambiado, pero no la política exterior de Estados Unidos. Solo ha pasado de la diplomacia de los cócteles a la diplomacia de la información. En mi experiencia, cada vez que he participado en una reunión con un funcionario del gobierno de Estados Unidos de América, siempre hay un asistente tomando notas. Esas notas las despachan al Dominican Republic Desk en el Departamento de Estado. ¿Qué hacen con esas notas? Las archivan y en la medida en que los acontecimientos se van desarrollando, las mismas se van actualizando, y luego pasan a los archivos nacionales. Para leerlas, hay que esperar que las mismas sean hechas públicas por el gobierno americano. Por ejemplo, a Chile le tomó más de veinte años, obtener el permiso para leer las notas sobre el involucramiento del gobierno norteamericano en el derrocamiento de Allende.

Wikileaks ha roto ese esquema. Ya los historiadores y los protagonistas de la historia no tendrán que esperar que los documentos se hagan públicos, y a veces, hasta censurados. y Wikileaks lo ha hecho através del Internet. ¡Qué poderosa herramienta!

Una nota final sobre los 1,675 cables despachados desde Santo Domingo. Recomiendo leer el libro Balaguer y los Militares Dominicanos, escrito por Brian J. Bosch, quien fuera Agregado Militar de Estados Unidos en la Embajada dominicana en Santo Domingo, para que se tenga una idea de cómo recolectan información y cómo la despachan. Mi apunte sobre este libro, aquí. Esto era entre 1971 y 1974. Solo imaginarse ahora con los avances tecnológicos y el poder de la información.

Colofón: Sobre Wikileaks, he escrito uno y dos apuntes.

Wikileaks y la prensa

23 Oct

La noticia que ha circulado por todo el mundo es, sin dudas, la reciente divulgación por parte de Wikileaks de los miles de documentos relacionados con la guerra de Irak. A veces, la noticia llega a un medio, y sin ninguna verificación, es divulgada, a veces sin saber las consecuencias que pueda generar. Es curioso ver los medios que específicamente Wikileaks seleccionó para enviar la información: The New York Times, The Guardian, Le Monde, Der Spiegel y Al Jazeera. Todos medios de una alta credibilidad. Estoy seguro que harían lo que, en efecto, hizo The New York Times, que los revisó, preparó los borradores de las notas que publicaría, y se los mandó al Pentágono:

«El New York Times le dijo al Pentágono los documentos específicos que planeaba publicar y mostró cómo habían sido redactados. El Pentágono dijo que hubiera preferido que el Times no publicara los materiales clasificados, pero no propuso ninguna edición al borrador.»

Pero, no solo se quedó ahí, sino que el periódico hizo lo siguiente:

«Como lo hizo con los documentos de la guerra de Afganistán, The Times ha redactado o retenido los documentos que pondría en peligro la vida o poner en peligro la continuación de las operaciones militares. Los nombres de los informantes iraquíes, por ejemplo, no han sido revelados.»

Asimismo, al lado de la noticia de Wikileaks, el periódico publicó la posición del Pentágono. Definitivamente, The New York Times ha ganado experiencia, luego de The Pentagon Papers. Eso es periodismo responsable.

Los plomeros

24 Ago

En un momento crucial de la película The Pentagon Papers, John Mitchell, HR Haldeman y John Ehrlichman, los funcionarios más cercanos al presidente Nixon, se cuestionan sobre qué hacer para evitar las filtraciones en la prensa, y uno de ellos, Haldeman, dice que la solución es buscar plomeros que estén prestos a evitar y correjir filtraciones. Días después, unos supuestos «asaltantes» penetraron en una de las oficinas donde se encontraban documentos claves del caso. Ese mismo grupo fue el que asaltó a Watergate, unos años después, con el conocimiento del presidente Nixon. Todo lo anterior viene a cuenta de que los años pasan, cambian la gente, pero la política se mantiene: EE UU da la espalda a Wikileaks. El gobierno de Estados Unidos prefiere tener plomeros frenando y evitando filtraciones, y no tratar directamente con quienes tienen la información. Es más, sentencian lapidariamente que «esos documentos son propiedad del Gobierno. Su publicación, no autorizada, amenaza las vidas de los soldados de la coalición y de los civiles afganos». Por suerte, la Suprema Corte de Estados Unidos decidió hace mucho tiempo que, en estos casos, la libertad de expresión está por encima de cualquier otro derecho o privilegio.